jueves, 25 de abril de 2013

EL RENACIMIENTO DEL CUENTO EN EL SIGLO XIX.



EL RENACIMIENTO DEL CUENTO EN EL SIGLO XIX.

El siglo XIX es el gran siglo del cuento. En la primera mitad algunos escritores como los hermanos Grimm, en Alemania, recogen por escrito narraciones populares de transmisión oral: Caperucita, Cenicienta, etc. El alemán Hoffmann crea en sus narraciones una atmósfera inquietante de irrealidad y misterio, a base de mezclar lo fantástico y lo cotidiano. Destaca su cuento El hombre de la arena.
En Norteamérica hay que mencionar a Washington Iruig, por cuentos como Rip Van Whinkle, que trata la historia de un hombre que se retira al monte y se queda dormido durante varios años. Cuando despierta, el mundo ha cambiado tanto que él se considera una reliquia del pasado. 
Edgar Allan Poe es el gran impulsor del género, y puede que sea el primer escritor estadounidense con una nueva forma de entender la ficción y la poesía. Su poema más conocido es El cuervo, escrito en forma de diálogo entre el pájaro y el propio autor. Pero Poe destaca como narrador con sus Narraciones extraordinarias.  Estos relatos sobresalen por la dosificación de la intriga, y por la capacidad de sorprender. Prefiere los detallados análisis psicológicos a la acumulación de acciones externas. En vez de la descripción de lugares se decanta por el análisis de la angustia que se siente en ellos. En cuanto a los contenidos de sus obras predomina el terror, crímenes, pesadillas, lo insólito y lo sobrehumano. Los relatos más conocidos son: Manuscrito en una botella, El escarabajo de oro, El corazón delator o El gato negro.
El ruso Chejov es también un gran renovador del cuento. Por sus relatos breves desfilan todos los estratos sociales. Chejov recrea sus vidas cotidianas con humor no exento de crítica, los relatos apenas tienen argumento y están escritos con sencillez y objetividad. Destaca su cuento Vanka, en el que el protagonista, que es un aprendiz de zapatero, escribe a su abueki una carta que nunca llegará. Podemos mencionar también al francés Maupassant, con cuentos como El Horla, en el que el autor, a través de un diario nos muestra las alucinaciones del protagonista, el cual siente un ente que él  llama el Horla. También destacan relatos como Bola de Sebo y El collar, que trata del esfuerzo de una mujer con aspiraciones de grandeza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario